El ingenio popular suele jugar con los apellidos de los funcionarios para, de manera jocosa, encontrar sobrenombres que los identifiquen. Así al ex intendente Osvaldo Cáffaro se lo llamaba ‘Cafforro’ o ‘Caffano’ y el intendente Marcelo Matzkin no es la excepción y ya hay quienes comenzaron a llamarlo Marcelo Cáffaro, nosotros somos unos de ellos, o ‘Matzketing’ por su afección a usar y abusar del marketing para la comunicación de su accionar al frente del gobierno municipal.
Y también están quienes comenzaron a llamarlo ‘Masking’, también producto de su forma de gobernar y comunicar, donde se enmascara la realidad para pretender hacer creer algo diferente a lo que es la realidad. Precisamente esa es la palabra clara, enmascarar.
¿Cuál el significado de ‘Masking’ en inglés? Enmascaramiento.
En psicología y sociología, el masking o enmascaramiento se refiere a las personas que camuflan su personalidad o comportamiento natural para adaptarse a lo que se espera de ellas, para mostrar la imagen ideal en las redes sociales.
¿Hay relación entre el masking y Matzkin?
Cuando uno repasa sus apariciones públicas en las redes, y contrapone sus declaraciones con la realidad encuentra que no hay un alineamiento entre ambas realidades y que, muy por el contrario, están bastante desalineadas. Las palabras alineadas a sus anuncios electorales, aunque muchas veces reformulados, y las acciones, en muchas oportunidades van en sentido contrario. Y cuando cuesta alinear discurso y acción, silencio.
Por eso dijeron ‘somos de Zárate’.
Por eso no explicaron la utilización del DAM por vecinos que no debieran haber podido utilizarlos.
Por eso no salieron a criticar la vandalización del espacio público.
Por eso no explican por qué Juan Manuel Iglesias utiliza un vehículo municipal cuando prometieron que ningún funcionario lo haría.
Por eso no explican por qué Juan Manuel Iglesias hace inteligencia ilegal cuando eso es un delito y sin embargo sigue siendo secretario del Intendente.
Por eso no explican por qué Marcelo Matzkin utiliza un Toyota Yaris cuando él mismo firmó que sería utilizado para el transporte de personal administrativo de la Secretaría de Seguridad.
Quizás éste es el mejor ejemplo del masking de Matzkin, ya que expone en las redes que pusieron al servicio de todos la camioneta que estaba al servicio de Cáffaro, pero esconde que tiene a su servicio un vehículo que debiera estar al servicio de los empleados administrativos de la Secretaría de Seguridad.
Muchos cuestionan por qué nuestra criticidad para el accionar del Intendente, y uno puede diferir en cuanto a las prioridades, las acciones o las inacciones, pero donde uno no debería diferir es en la correlación entre palabra y acción. La palabra no debe enmascarar una acción o una inacción, la palabra debe servir para comunicar una acción o una inacción, porque como dijera el 10 de diciembre el propio Intendente ‘si hacemos las cosas con honestidad, con decisión y con tomar lo que estamos convencidos que tenemos que hacer, vamos a poder dar la discusión de por qué hicimos en el Estado, pero no podemos dejar de dar la discusión’
Quizás hoy no dan la discusión porque no todas las cosas se hacen con honestidad.
Zárate necesita un Intendente, no un relacionista público.
Zárate necesita la verdad, no un enmascaramiento de la realidad.
La clave entonces es ¿qué se hace frente a eso?
El primer paso desenmascarar, mostrar que el rey está desnudo.
El segundo comenzar a trabajar en una realidad diferente.
Toda marcha comienza en un paso, tenemos que estar dispuestos a darlo.
Como dijera Raúl Alfonsín, nosotros estamos en la marcha y es preciso que se sumen todos, quienes estén dispuestos a hacer lo que se debe hacer. ‘Los radicales ya estamos en la marcha, y al frente de nuestra columna van: Alem, Yrigoyen, Pueyrredón, Sabattini y Lebensohn, Larralde, Balbín, Illia. Los que estén a nuestra derecha pueden inspirarse, si lo desean, en Sáenz Peña o en Pellegrini; los demócratas progresistas, en Luciano Molina o en Lisandro de la Torre; los socialistas, en Juan B. Justo o Alfredo Palacios; los peronistas, en Perón o en Evita…, pero ¡juntos!’, y fundamentalmente los jóvenes, los pibes, las pibas, los cholitos y la cholita.
‘Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo, oralmente. Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando. Millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror.’
RODOLFO WALSH – AGENCIA CLANDESTINA DE NOTICIAS