hoy viniste a decirme
otra vez lo mismo
Finalmente, y antes que se venciera el plazo último para la oficialización de listas por parte de la Junta Electoral de la Provincia de Buenos Aires, el Intendente Municipal Osvaldo Cáffaro aprovechó una puesta en escena en el cañadón del Urquiza para anunciar que irá por un nuevo mandato al frente del Departamento Ejecutivo Municipal. Por un rato estuvieron las máquinas ‘trabajando’, pero a poco que se fue el Intendente también se fueron las máquinas.
Curiosamente el Intendente habló del embellecimiento del lugar pero nada del tratamiento de las aguas que correrán por debajo de la ‘obra’. El propio Cáffaro mencionó que el colector cloacal recolecta y deposita en el río los desechos sin tratamiento alguno, pero lo importante para él era el parque, así estamos. Y lo sostuvo sin ponerse colorado después de 16 años de (des)gobierno.
Pero tras el final de la presentación el Intendente fue consultado sobre su nueva postulación a la Intendencia Municipal, y allí, en línea con sus anuncios, hizo agua.
En el improvisado diálogo ante los medios tuvo un grosero Fehlleistung, un acto fallido como una especie de ‘traición’ del inconsciente, que hace que el sujeto diga lo que conscientemente no quería decir o haga lo que no quería hacer, revelando así un deseo o intención inconscientes.
Eso fue lo que hizo el Intendente al afirmar, en referencia a Zárate, ‘hoy es una ciudad donde el dirigente de un club quiere a su club, no es un puntero político el dirigente barrial, jamás le pedí eso ni lo voy a seguir pid… ni lo v… ni lo voy a hacer’. Sus palabras recuerdan al remanido ‘nunca lo hice ni lo voy a volver a hacer’.
¿A quién se habrá querido no referir Cáffaro? ¿A Julián Rojana, vicepresidente de Defensores Unidos que integra en el tercer puesto de concejal la lista que él encabeza, como en la elección pasada la integrara Alejandro Escobín, entonces Presidente del Club Belgrano?
Cualquier dirigente deportivo o barrial, como cualquier ciudadano que cumple con las normas, está en condiciones de candidatearse, siempre que no lo haga en alguna de las listas que los dirigentes de Unión por la Patria no quieran que compitan, claro está, por ello es más que llamativa la asociación que, inconscientemente, hizo el inconsciente del Intendente.
¿Qué quiso decir Cáffaro al tratar a los dirigentes barriales como punteros políticos? ¿Para él lo son? ¿Ese será el rol de Rojana en la campaña? ¿O se dedicará al transporte? ¿O a asegurarla?
¿Por eso tantos encuentros con dirigentes deportivos? ¿Por eso los subsidios a los clubes? ¿Para que nadie saque los pies del plato y ahora aporten votos para la re re re reelección?
¿Por eso tantos encuentros con referentes barriales? ¿Porque son los punteros caffaristas?
No estaba cómodo el Intendente ante las preguntas que le realizaron, y eso que no hubo cuestionamientos incisivos, si así arrancamos la campaña se vienen cinco semanas para alquilar balcones.
Tampoco estaba cómodo Walter López, primer candidato a concejal en la lista oficial y subsecretario de Desarrollo Territorial, quien dada su postulación es colocado como decorado en cuanta puesta en escena organiza el Municipio. Pero el no cometió ningún fallido, ni siquiera lo dejaron hablar.
Triste realidad la que depara a los zarateños, triste la honestidad bruta del Intendente, como dijera el Andrelo, no va más.
‘Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo, oralmente. Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando. Millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror.’
RODOLFO WALSH – AGENCIA CLANDESTINA DE NOTICIAS
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