En junio del año pasado escribimos una columna que titulamos ‘Tolerancia cero‘ en la que denunciábamos que ‘la Municipalidad elige qué ciudadanos pueden informarse y mantener contacto con la misma a través de la red Twitter’, y poníamos por ejemplo el caso de la Jueza Naomi Buchwald quien en Estados Unidos y en relación al accionar en Twitter del Presidente Donald Trump, vino a decir que el limitar quién puede ser seguidor o no de una cuenta oficial son una violación a la libertad de expresión puesto que bloquear a los usuarios ‘basándose en sus mensajes políticos constituye un punto de discriminación’.
Pese a la denuncia pública de la situación, nada cambió, y el bloqueo se generalizó a otras cuentas institucionales, como la de la Secretaría de Salud, y a algunos funcionarios públicos, como el propio Intendente, quien después desbloqueó mi cuenta, la Secretaria de Salud, Rosana Núñez, el Presidente del Concejo Deliberante, Ariel Ríos, o la Presidente del Bloque de Concejales de Nuevo Zárate, Ana Laura Allemann, entre otros.
Pero un buen día algo cambió.
El pasado jueves recibí en mi teléfono un mensaje de un número desconocido en el que me invitaban a charlar, Amanda Larroza, Directora General de Políticas Comunicacionales de la Municipalidad de Zárate era quien me invitaba a charlar. No sin sorpresa por el mensaje, acordamos juntarnos el sábado a tomar un café y así lo hicimos.
Intercambiamos pareceres sobre la realidad del Distrito y sobre el rol del periodismo y coincidíamos, aún con nuestras diferencias, en la importancia de decir libremente lo que uno piensa, y en la importancia de escuchar a quien no piensa como uno.
Le pedí entonces tres cuestiones a Larroza, el desbloqueo por parte de quienes administran las cuentas oficiales de quienes piensan diferente, la apertura del multimedios local al pensamiento opositor y la disponibilidad de las estadísticas oficiales para poder tomar conocimiento real de lo que ocurre en el Distrito.
Y Larroza dio el primer paso.
Después de más de un año de la denuncia de la invisibilización del pensamiento oficial, al menos para quienes no lo compartimos, y apenas unas horas después del pedido, volvimos a poder seguir la cuenta de Twitter del Municipio.
Puede parecer algo menor, pero no es poco que el gobierno local acepte el pensamiento crítico y escuche a quien piensa distinto, sobre todo porque es algo al que no estamos acostumbrados.
Decía Lao-Tse que “un viaje de mil millas comienza con un primer paso”, este fue un buen primer paso, el tiempo dirá si es el comienzo de un viaje de mil millas.