Junto a la Plaza España, que fue arrasada por el avance vehicular, la Plaza Italia es uno de los recuerdos más lindos que tengo de niño de una plaza en Zárate. Eran lugares donde corríamos y jugábamos sin parar, donde la imaginación campeaba a sus anchas y donde nuestros padres tenían la tranquilidad de contar con juegos que nos divertían sin ponernos en riesgo.
El tiempo pasó y las cosas cambiaron, la Plaza España ya no existe y la Plaza Italia está abandonada.
Los chicos, que ya no juegan en la calle como nosotros, tampoco encuentran en las plazas un ámbito en el cual poder desarrollar su imaginación en sus juegos… porque los juegos no están preparados para ellos.
¿Cómo imaginar que uno se hamaca hasta el cielo si la hamaca no existe?
¿Cómo buscar el equilibrio junto a un amigo si no subimos ni bajamos?
¿Cómo creer que uno iba cayendo en un precipicio si uno puede quedar enganchado, y lastimarse, en una madera del tobogán?
Así está hoy la Plaza Italia. Un peligro para los chicos… y para los mayores, porque los problemas no se circunscriben solo a los juegos, hay cables al aire en las instalaciones eléctricas…
No hay luces que den seguridad a quienes llegan a ella por las noches…
Y si uno ve una situación que lo asusta, que le genera pánico, tiene que gritar o correr, porque si busca el botón antipánico no lo va a encontrar. Si se robaron hasta el botón antipánico, ¿qué les puede esperar a los transeúntes?
Cierto es que poner en valor la plaza lleva tiempo y dinero y recién lleva dos meses el nuevo gobierno, y aunque ya pudo darle cuatro millones de pesos a Defensores Unidos aún no pudo dedicar dinero a la puesta en condiciones de la Plaza Italia.
Pero hay cosas para las que no se necesita dinero, solo se necesita criterio y querer hacer las cosas bien.
Argentina enfrenta hoy un fuerte aumento de los casos de Dengue, y el Municipio, aunque no fumiga, hace campañas para procurar la descacharrización y evitar mantener recipientes con agua estancada que sean focos de proliferación del mosquito Aedes Aegypti.
Pero el Municipio no hace lo que dice que hay que hacer.
Y la mejor campaña, como en la crianza de un hijo, es con el ejemplo.
Esto está mal.
El arreglo de la plaza no debiera, pero puede esperar. Quizás llevarlo a cabo en varias etapas pero atacando lo urgente. Esto hay que corregirlo YA.
Para hacer las cosas bien, el primer paso es querer hacerlas bien.
‘Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo, oralmente. Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando. Millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror. Haga circular esta información’.
RODOLFO WALSH – AGENCIA CLANDESTINA DE NOTICIAS