Tras las elecciones del último domingo muchos tratan de explicarse en Argentina, y fuera de ella, por qué Javier Milei fue consagrado Presidente de la Nación, búsqueda que se hace más frecuente entre quienes no compartimos sus ideas. Creo que difícilmente encontremos una respuesta si lo hacemos a partir de nuestros ideales y, fundamentalmente, nuestra realidad cotidiana. Comemos todos los días y, la mayoría de las veces, elegimos qué comer. Nos duchamos con agua caliente. Dormimos sobre un colchón. Con cierta periodicidad nos compramos ropa. Nos damos ciertos gustitos.
Pero no todos viven nuestra realidad y tenemos que saber tener una mirada holística que nos permita comprender la totalidad de la realidad y no solo nuestra cotidianeidad. Días atrás hablando con un amigo extranjero me dijo ‘pero eligieron un fascista’, y coincido con su apreciación, el problema es que en la Argentina de hoy preocuparse por el fascismo es un privilegio de pocos, para la mayoría la preocupación es comer todos los días.
Argentina vive una gran crisis, en términos económicos y en términos morales, donde como dice el tango da ‘lo mismo un burro que un gran profesor’, y donde el esfuerzo no es recompensado. Gran parte de la sociedad entiende que su esfuerzo va en favor de quienes no se esfuerzan y que la mitad del país vive a costas de la otra mitad. Un país donde ‘Dos de cada tres niñas y niños de Argentina (66%) son pobres por ingresos o están privados de derechos básicos, como el acceso a la educación, la protección social, a una vivienda o un baño adecuado, al agua o a un hábitat seguro’ según denunció UNICEF. Un país con un 140% de inflación interanual. Un país en donde la inversión familiar se comprimió puesto que como los bienes de capital son imposibles de adquirir, se comienzan a comprar bienes de consumo. Y cuando esto comienzan a encarecerse, quienes pueden adquieren bienes de consumo cortoplacista en lugar de bienes de consumo a largo plazo. Como dijera Ergasto Riva, ‘La resignación al acceso de bienes de importancia aumenta el de bienes y servicios fútiles. Así fue que resignamos primero ser propietarios de una vivienda mientras aumentaba la venta de autos; luego nos conformamos con no tener auto, pero poder viajar; y ahora ya nos damos por satisfechos con ir al teatro y comer una pizza un sábado a la noche.’
¿Por qué no Milei entonces? Pero no porque se coincida con sus ideas sino porque se coincide en el rechazo a la situación actual y Javier Milei es el vehículo para tal fin. El fin justificó los medios. Gran parte del electorado argentino votó, en ambos frentes electorales, ‘en contra de’ y ‘en favor de’.
Y la mayoría de la ciudadanía que acompañó a Javier Milei es muy diversas en sus opiniones, en sus intereses, en sus reclamos… pero Milei obtuvo más del 55% de los votos, con las particularidades del caso puesto que se trató de un ballotage, lo que constituye el mayor porcentual obtenido por un candidato presidencial desde el regreso de la democracia hace 40 años.
Pero a su vez, y producto del sistema electoral argentino, no hay ningún gobernador de su fuerza política, sus bloques parlamentarios son exiguos y no tiene respaldo institucional. Tan solo tiene el respaldo electoral… y económico.
El problema entonces radica en cuáles son las consecuencias de esta elección, porque una realidad es aunar esfuerzos para destruir una construcción, y otra muy diferente que nos juntemos, y nos pongamos de acuerdo, en qué queremos construir en su lugar…
Y el Presidente electo fue claro al respecto, con su elección se rompieron los manuales electorales, dijo, puesto que él no prometió una cosa y pretende hacer otra, sino que pretende llevar adelante las ideas que presentó durante su campaña, aunque una vez más haya quedado de manifiesto aquel viejo Teorema de Arnulphi que señala que las propuestas se moderan a medida que aumentan las posibilidades de acceso al poder, y entonces Milei volvió a hablar de generaciones de reforma, agrupando sus propuestas en torno a nociones de primera, segunda y tercera generación.
¿Cuál será la recepción de la ciudadanía respecto a las medidas que, según explicó Milei, serán inmediatas y drásticas? El ex Presidente Macri, quien se constituyó en factor determinante del triunfo del nuevo Presidente tras anunciar públicamente su acompañamiento de cara al ballotage de quien finalmente fue ungido como primer mandatario, fue claro al respecto ‘Los orcos van a tener que medir muy bien cuando quieran hacer desmanes’, en referencia a quienes se opongan a las medidas de gobierno.
Por su parte, dirigente de quienes serán oposición a partir del 10 de diciembre anunciaron que ‘los derechos conquistados serán defendidos en las calles’.
De cómo se dirima esa lucha, en las instituciones y en la calle, dependerá el futuro de la Argentina.
Y esa es la incógnita, puesto que si a este argumento racional sumamos lo paranormal, la mesa está servida.
El siglo pasado vivió en Argentina vivió Benjamín Solari Parravicini, quien fuera llamado ‘El Nostradamus argentino’. Entre sus múltiples predicciones, muchas de las cuales se corroboraron en la realidad, en los últimos días hubo unos pictogramas, que era como él enunciaba sus ‘mensajes’, que llamó la atención.
Parravicini dijo ‘La Argentina tendrá su Revolución Francesa, en triunfo, puede ver sangre en las calles si no ve el instante del hombre gris’.
Muchos relacionan al ‘hombre gris’ con Javier Milei, por ser una opción diferente al blanco y negro de la grieta que dividió al país las últimas décadas. ¿Será?
En cualquier caso, ya sea por una cuestión racional o una metafísica, está claro que las condiciones subjetivas estaban dadas, Ernesto Guevara dixit, para el triunfo de Javier Milei.
Cabe entonces preguntarse, una vez más, ¿por qué no Milei?
Que comience el juego.
‘Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo, oralmente. Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando. Millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror.’
RODOLFO WALSH – AGENCIA CLANDESTINA DE NOTICIAS