Sí, Lucas Castiglioni tiene razón, muchos argentinos son adeptos al ‘Si pasa, Pasa… complicidad y Silencio’, y él es un claro ejemplo de ello.
Es muy bueno que identifique errores en el accionar del gobierno y los marque, para que se puedan corregir y no acentuarlos, pero como él mismo reclama, es importante dar la cara y hacerse cargo y no esconder la cabeza como el ñandú.
Lucas Castiglioni no puede olvidar que él ingresó como Concejal por el Frente de la Victoria, fracción peronista que sostuvo y defiende los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. Como aparentemente sufre de amnesia selectiva me permito puntualizar algunas cuestiones, que por lo groseras, han quedado grabadas en la memoria colectiva, aunque no se agotan en sí mismas.
Se pregunta Castiglioni ‘¿Dónde están los cuestionadores que denunciaban que se beneficiaba a constructores para obra pública en el Gobierno de CFK?’ y entonces es oportuno preguntarle, ¿Dónde estaba él cuando se denunciaba que se beneficiaba a constructores para obra pública en el Gobierno de los Kirchner?
Se pregunta Castiglioni ‘¿Dónde están aquellos que cuestionaron la corrupción, el sobreprecio y las licitaciones a sobre cerrado?’, y entonces es oportuno preguntarle, ¿Dónde estaba él cuando cuestionábamos la corrupción, el sobreprecio y las licitaciones a sobre cerrado, no sólo a nivel nacional sino a nivel provincial y municipal? Es más, ¿dónde estuvo desde el 10 de diciembre de 2015?
Y podemos agregar…
¿Dónde estaba Castiglioni cuando se destinaba dinero a Fútbol para Todos y no a la salud y la educación?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando se destinaba dinero a Automovilismo para Todos y no a infraestructura por ejemplo?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando se anunciaba la compra de aviones hidrantes que nunca se compraron?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando se anunció la construcción del polo cinematográfico en la Isla Demarchi… y hoy todos vemos lo que es la isla Demarchi?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando Ricardo Jaime y Néstor Kirchner realizaban negociados con el sistema de transporte y morían 51 personas en Once?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando nombraron al (presunto) genocida César Milani como Jefe de Ejército?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando se otorgaba obra pública a Lázaro Báez y la obra se cobraba y nunca se ejecutaba?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando el Estado o empresas nacionales como la línea aérea de bandera contrataba hoteles de la ex Presidente en una clara incompatibilidad de funciones?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando el INDEC ocultaba y mentía sobre los principales indicadores económicos argentinos?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando Aníbal Fernández dijo que Argentina tenía menos pobres que Alemania o los ahora devenidos defensores de la ciudadanía que sostenían que dar los índices de pobreza era estigmatizar a los pobres? Pobre Castiglioni, que falta de memoria.
¿Dónde estaba Castiglioni cuando José López pretendió ocultar dinero en un hogar de monjas?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando desapareció Julio López?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando Amado Boudou daba como domicilio un médano?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando Argentina negoció el negociado del Memorándum con Irán?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando Alberto Nisman denunció el negociado del Memorándum con Irán?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando murió Alberto Nisman y la ex Presidente salió corriendo (en sillas de ruedas porque había sufrido un esguince) a decir que había sido un suicidio?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando aumentó el narcotráfico en el país durante la última década y Zárate no es ajeno a ello?
¿Dónde estaba Castiglioni cuando la familia Kirchner tuvo el desmedido incremento patrimonial que tuvo en tan poco tiempo?
Y así podemos seguir preguntándonos dónde estuvo Castiglioni en muchos otros momentos, en todos los que calló sin hacerse cargo de los errores ni criticar los delitos de sus compañeros de Partido. En realidad sabemos dónde estaba Castiglioni. Formaba parte del gobierno sobre el cual tiene memoria selectiva, ya que desde su función a cargo de la Agencia local de ANSES algo debería recordar. Y le recuerdo que desde el 10 de diciembre de 2015 forma parte del gobierno municipal y por lo tanto es corresponsable por acción u omisión.
Lucas Castiglioni tiene razón, muchos argentinos son adeptos al ‘Si pasa, Pasa… complicidad y Silencio’, pero no todos somos así.
Pero hay algo en lo que creo que no tiene razón Castiglioni, la antinomia no es pueblo | antipueblo, la división es entre ciudadanos honestos y delincuentes, puesto que siguiendo su lógica también debe considerarse antipueblo, aunque él no lo haga, el robarle al pueblo. Y en esa nueva dicotomía, la de honestidad | delincuencia, lamentablemente no están todos los buenos de un lado y los malos del otro, por eso hay que trabajar para que los delincuentes vayan presos. Y hacerlo de manera honesta, porque para poder señalar errores en los otros hay que reconocer primero horrores en los propios, si no, como decía mi abuelo, es predicar la moral con la bragueta abierta.
No es cuestión de cuestionar al mensajero… sino el mensaje, pero no hay que obviar que el mensajero hace al mensaje. Para poder criticar hay que saberse criticar. Para poder cambiar hay que saber cambiar.
Y para poder cambiar las cosas en serio es necesario tener autocrítica y asumir los errores cometidos para poder corregirlos y no esconderlos bajo la alfombra o, lo que es peor, negarlos y generar su propio relato. Sólo así podremos no repetirlos en el futuro, porque no todo pasa, aunque durante más de 12 años quisieran hacernos creer que era así.
Publicado en Enlace Crítico, Zárate.
http://www.enlacecritico.com/columnistas/lucas-castiglioni-tiene-razon-en-casi-todo