Cuando en mayo de 2020 Marcelo Heiz fuera denunciado por abuso sexual por parte de una empleada municipal, rápidamente filmó un video en el que dijo que ‘Por dichos de terceros, me enteré que habría una denuncia en mi contra en estos días, por lo cual me puse a disposición inmediatamente de la Justicia […] Entiendo que es una denuncia grave, por lo cual pedí inmediatamente al señor intendente Municipal, que me otorgue una licencia para poder investigar a fondo este tema, para aportar todo lo que sea necesario y para clarificar este hecho que realmente me lastima como persona y lastima todos mis conocidos’.
Falso. Mintió. Lo que hizo fue tomarse vacaciones. En los considerandos del Decreto lo especifican. ‘El Sr. Marcelo Heiz, solicito licencia por descanso anual’.
Lo curioso del caso es que habiendo renunciado a su puesto anterior se le mantenga la antigüedad para gozar de vacaciones, ventajas de la administración pública y la mala administración de la cosa pública.
Según dice el propio texto legal, ‘mediante el Decreto N° 315/20, citado en el Visto, se designó a partir del 19 de Mayo de 2020, al señor Marcelo Heiz, para desempeñar las funciones de Subsecretario de Seguridad Ciudadana’, y nueve días después pide vacaciones… ¡y se las dan!
O será que en la calesita del empleo municipal zarateño, que bien resume este Decreto en el que le aceptan la renuncia para un puesto y lo designan para otro, con competencias y capacidades específicas muy disímiles entre sí, mientras la noria gire y uno no se baje le vale el mismo boleto…
Pero no quedan allí las curiosidades, puesto que si bien estuvo el 80% del mes de vacaciones, el Intendente decidió pagarle a Heiz el adicional ‘tiempo pleno., sobre quien recordemos pesaba y pesa una denuncia de acoso sexual.
Esto adquiere más curiosidad cuando se analizan las fechas. Heiz estaba de vacaciones hasta el 24 de junio… y el Intendente le asigna el 30% de tiempo pleno por el Decreto N° 381 de fecha… 23 de junio.
Se exceden de desprolijos, es un zafarrancho.
Se hacen las cosas mal, nadie controla nada, todos firman todo y siga la joda.
Obviamente, como es de esperar en un gobierno como el encabezado por el Intendente Osvaldo Cáffaro, terminada la licencia anual, Heiz volvió a trabajar como si nada pasara y así lo hemos reseñado en variadas oportunidades, especialmente durante su estadía en el Hospital Intermedio Municipal Dr. René Favaloro donde no respetaba las medidas sanitarias vigentes. En Agosto es incluido entre quienes cobraron la Bonificación por Emergencia Sanitaria COVID-19, esa trampa municipal que implantaron para no pagar ganancias, y en septiembre los $10.000 no remunerativos que papi Osvaldo dio ‘a los agentes y funcionarios, cualquiera sea su categoría de revista en el plantel municipal’, a fin de acallar las críticas internas por la orgía de dinero que se había montado entre los funcionarios de mayor rango.
Muchos argumentan que no hicieron nada sobre esta realidad porque la desconocían, ahora que la conocen, ¿Harán algo?
Los ciudadanos estamos desamparados, no hay quien nos represente ni vele por nuestros intereses.
Las autoridades municipales hacen lo que quieren sin rendir cuentas a nadie.
Más temprano que tarde llegará ese momento.








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