Como señalaba una campaña viral realizada en las elecciones de 2015, en las que día a día aparecían publicadas en las redes sociales las mentiras del Intendente Osvaldo Cáffaro y su equipo, los datos demuestran, uno a uno, que Cáffaro miente.
Estábamos escribiendo esta nota encarándola sobre la diferencia entre legalidad y legitimidad. Respecto a que el Municipio tiene la legalidad para exigir el cumplimiento de las ordenanzas, pero carece de la legitimidad para hacerlo, puesto que ellos mismos las incumplen y no exigen su cumplimiento.
Un ejemplo de ello es el cartel publicitario de Nuevo Zárate que está colocado en una de las plazoletas de ingreso a Zárate en Avenida Lavalle. Allí, los funcionarios en su rol de candidatos o bien en apoyo de los mismos incumplen la ordenanza vigente respecto a publicidad política ni exigen el cumplimiento de la misma. Pero la investigación periodística nos llevó por otros lados que, aunque diferentes, tienen puntos en común con esto que aquí contamos.
Estos carteles tienen como común denominador el uso de un hashtag con el que, tanto desde el Municipio como desde el Partido, mezclando y confundiendo el rol de cada uno, pretenden hacernos creer que lo que el Municipio realiza lo hace #conlonuestro.
Sin embargo cuando uno investiga un poco encuentra que esto no es así. Se topa con la realidad que demuestra que Cáffaro miente y su equipo es cómplice de la mentira.
La información oficial disponible expone que el Municipio de Zárate fue creciendo año a año en su Presupuesto, pasando de $ 116.980.000 en 2010 a $ 770.000.000,00 en 2016, es decir que en 7 años creció un 658%, y que los aportes propios pasaron de $ 49.839.121 en 2010 a $ 428.232.470,20 en 2016, es decir que en 7 años los aportes propios crecieron un 859%. Esto explicaría lo que Cáffaro se ufana a cada paso… el haber hecho que los aportes municipales hayan pasado del 45,0% al 54,1% del Presupuesto en 7 años, lo cual es una verdad a medias, porque hace varios años que el Municipio viene haciendo las cosas #conlonuestro, ya que en 2014 los aportes locales alcanzaron el 56,6% del Presupuesto.
Es decir que si se han debido subejecutar obras no tiene que ver solamente con la falta de partidas externas sino con la forma en la que se administra lo propio. Si en 2014 y con menos aportes que en 2016 se pudieron realizar obras significa que actualmente el dinero propio que antes se utilizaba para obras debe utilizarse para otros gastos; sería interesante saber cuáles son.
Pero en 2014 el Intendente Cáffaro no salía en los medios a reclamar por la caída en los aportes que realizaba la Provincia de Buenos Aires, muy por el contrario acompañaba al entonces Gobernador en su campaña presidencial e incluso convocaba a una Mesa Política local en su apoyo.
Tampoco cuenta el Intendente que entre 2014 y 2016 el Estado Nacional duplicó porcentualmente los aportes que gira a Zárate, pasando del 2,5% del Presupuesto al 5,0% del mismo, pasando de los $ 10.475.145,60 de 2014 a los $ 39.262.843,90 de 2016, teniendo un crecimiento real del 375%; ni que entre 2010 y 2012 no hubo aportes del Estado Nacional al Presupuesto local.
Tampoco cuenta el Intendente que mientras para el mismo período los aportes nacionales crecieron un 375%, los aportes locales crecieron un 187%, con lo cual Cáffaro miente cuando dice que Zárate vive #conlonuestro. Y los aportes provinciales se mantuvieron, en términos porcentuales, constantes en los últimos años. Zárate siempre recibió durante los últimos 10 años en torno al 0,58% del total de las transferencias realizadas por la Provincia de Buenos Aires a los Municipios, y que en 2017 se incrementaron respecto al año anterior.
Dice el dicho que el ladrón cree que todos son de su condición, y quien no tiene mucho apego a las normas cree que nadie lo tiene. Cáffaro cree que Vidal tiene un encono contra su gobierno y que por ello le envía menos dinero, pero lo que no sabe, aunque debería saberlo y reconocerlo dado su gestión como Diputado Provincial y como Intendente, es que el reparto lo dispone la ley provincial 10.559, que establece que las Municipalidades de la Provincia recibirán en concepto de coparticipación el 16,14% del total de ingresos que percibe la Provincia en concepto de impuestos sobre los Ingresos Brutos no descentralizados al ámbito municipal, Impuesto Inmobiliario Urbano, Impuesto a los Automotores, Impuesto de Sellos, Tasas Retributivas de Servicios y Coparticipación Federal de Impuestos, y que esa torta, a su vez, se reparte teniendo en cuenta la proporción de la población, la capacidad tributaria “per cápita” de la población, la superficie del partido, la cantidad de establecimientos de atención a la salud y la transferencia de funciones que en rigor corresponden a la Provincia.
De esta ecuación sale el monto que recibe Zárate de la Provincia de Buenos Aires. No es un capricho, como parece que quisiera Cáffaro que fuera, sino que lo dispone una ley provincial.
Casi dos años atrás decía el Intendente, agradeciendo la presencias de Julio de Vido en la asunción de su tercer período al frente del Departamento Ejecutivo Municipal que ‘florezcan mil flores […] a quien siento como realmente como un compañero, como un amigo, un militante de siempre que siempre está, que es a Julio De Vido quien va a dejar, sin dudas por todo el apoyo que hemos tenido, en esta Ciudad una estampa grabada a fuego para siempre, gracias Julio por acompañarnos a este gobierno como ciudadano de Zárate, lo digo como vecino y porque siempre va a estar.’
Lo que puede haber cambiado con el cambio de gobierno es la discrecionalidad con la cual se giraban fondos a Zárate, quizás ello se deba a que ya no tenemos como vecinos a los mismos de siempre, quizás se deba a que se marchitaron las flores.
Quizás sea que mientras las mentiras de Cáffaro florecen en Zárate, las flores florecen en Marcos Paz.
Publicado en El Debate, Zárate.
http://www.eldebate.com.ar/caffaro-miente-2/
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