No hay dos sin tres

No hay edición alguna del BOM que no contenga errores. Realmente es penosa la labor de Irene Guehenneuf como Directora de Publicación de Normas.

Aunque lo más llamativo fueron los Decretos 73 y 74 que no solo contienen errores sino que, además y fundamentalmente, son indefendibles políticamente.

Comencemos por los errores.

Publicaciones incompletas: una omisión deliberada o un descuido grave

En uno de los considerandos del Decreto 73 se menciona ‘Que, a fs. 1165 la empresa Montero Diego Raúl, expresa su conformidad a la continuación de las tareas de Mantenimiento de Espacios Verdes de la Licitación N° 13/2020 Sector II; (acá habría que poner la nueva conformidad del mes de enero de 2025);’, es decir, publicaron el Decreto incompleto, un borrador del texto, olvidaron agregar la nueva conformidad de la empresa, ¿existe? es de suponer que sí. Pero no solo el Decreto 73 contiene ese error, se repite en el Decreto 74, donde en uno de los considerandos se menciona ‘Que, a fs. 1147 la empresa Silyr Cleand S.R.L., expresa su conformidad a la continuación de las tareas de Mantenimiento de Espacios Verdes de la Licitación N° 12/2020 Sector I; (acá habría que poner la nueva conformidad de la empresa para enero 2025);’ no en vano dice el dicho que el hombre (o la mujer en este caso) es el único animal que se tropieza dos veces con la misma piedra. Penosa labor la de Irene Guehenneuf.

Contratos prorrogados sin licitación: una decisión indefendible

Más allá de los errores técnicos, lo realmente escandaloso es la reiteración de prórrogas contractuales sin la realización de una nueva licitación. Ambos contratos vencieron el 15 de enero de 2024 y, a pesar de los reiterados anuncios del intendente Marcelo Matzkin sobre la necesidad de renovar el proceso licitatorio, la realidad muestra que el servicio sigue en manos de las mismas empresas sin mediar competencia alguna.

Pero no solo contiene errores, dijimos además que estos Decretos son indefendibles políticamente, y lo son, inicialmente, porque ambos contratos concluyeron el día 15 de enero de 2024 y fueron prorrogados en varias oportunidades argumentando que ‘es un servicio esencial e ininterrumpible, dado que tienen un impacto sobre la higiene y salubridad del partido de Zárate’, y durante más de un año de gobierno no tuvieron el tiempo ni la voluntad de llamar a una nueva licitación. ¿Tendrá que ver que Silyr Cleand S.R.L. es propiedad de la familia de un ex mayor contribuyente caffarista y que Diego Montero es el Presidente de Defensores Unidos, club del cual son autoridades varios funcionarios de Marcelo Matzkin? ¿Están direccionados los proveedores municipales?

Diferencias de costos y opacidad en los contratos

Además, llamativamente el contrato de Montero tiene una actualización de 2,7%, en línea con el aumento recibido por los empleados municipales y bastante por debajo del aumento recibido por los funcionarios municipales, pero el contrato de Silyr Cleand S.R.L. tiene una llamativa reducción de 3,2%. Nada se explica en los textos legales de por qué de dicha diferencia.

La falta de voluntad política para cambiar el status quo es notoria y evidente. De hecho en ambos Decretos se repitió cada vez que se extendió el plazo ‘Que, en consecuencia, y con el objeto de garantizar la continuidad de la prestación del servicio, y encontrándose en trámite la nueva licitación pública corresponde proceder a la suscripción de prórrogas contractuales por el plazo de treinta (30) días cada una, de manera excepcional, manteniendo idénticas condiciones contractuales a las previstas en el Licitación Pública aplicable;’ (sic) lo cual también es una mentira puesto que no hay ninguna licitación pública en trámite.

Son mentirosos seriales.

Promesas incumplidas y gestión de la mentira

En marzo pasado ya habíamos advertido sobre las incongruencias en los anuncios del intendente Matzkin. En su momento, aseguró en redes sociales que no renovaría los contratos vigentes y que iniciaría una nueva licitación con mayores exigencias y coberturas. Sin embargo, dos semanas después, los Decretos 202 y 203 ratificaron las prórrogas contractuales sin modificaciones sustanciales.