Días atrás comentamos, la plataforma presentada por La Libertad Avanza de cara a los comicios venideros.
En esta oportunidad analizaremos el escrito presentado por Unión por la Patria, el concepto de escrito no está elegido al azar ya que no se trata de una plataforma electoral sino de un manifiesto político, en el que los representantes de los 20 partidos que integran la agrupación en el orden nacional plantean su cosmovisión del mundo. Curiosamente al pie del texto firma el eterno Gobernador formoseño Gildo Insfrán mientras que las restantes autoridades partidarias firmaron un papel en blanco. Mejor evidencia del rol que ocupan en la coalición, imposible.
Tras innumerables referencias al pasado y sin asumir el compromiso propio en la situación actual del país, ignorando adrede su responsabilidad histórica de la realidad actual, tanto por el presente y el pasado inmediato como por el pasado mediato, las autoridades de los partidos integrantes de Unión por la Patria responsabilizan de la situación actual a Mauricio Macri, el Fondo Monetario Internacional, el COVID-19, y todo aquel a quien se le pueda endilgar algún tipo de culpa.
A eso dedican cinco de las poco más de seis páginas del documento, y en media carilla enumeran sus propuestas de gobierno. Eso demuestra lo importante del pasado sobre lo turbio del futuro que es la mirada de los que ahora se unen por la patria.
Enuncia el texto ‘Es por todo esto que los y las convocamos a acompañarnos para recuperar el poder adquisitivo de los salarios y jubilaciones; garantizar y defender los derechos vigentes y promover nuevos derechos en el mundo laboral actual, y así mejorar las condiciones de vida de nuestro pueblo; estabilizar los precios sin afectar el nivel de empleo; recuperar la participación del salario de los trabajadores en el ingreso nacional; desmonopolizar y estimular la competencias; federalizar la producción y el empleo; impulsar una revolución educativa, federalizar y fortalecer el sistema científico tecnológico; impulsar la política satelital; crear un sistema de salud integrado; consolidar las políticas de acceso garantía de derechos en materia de discapacidad y salud mental; implementar una política integral de cuidados; promover legislación para el acceso a medicamentos gratuitos, elección libre de prestadores y servicios médicos para afiliados al INSSJP; desarrollar políticas e incentivos en sectores estratégicos de la economía popular; implementar una política integral de acceso a la tierra, la vivienda y al hábitat digno; fortalecer las empresas públicas nacionales; promover la articulación público privada para estimular la adopción de nuevas tecnologías y promover la creación de empresas; promover un salto histórico en el valor de las exportaciones 2024-2028; desarrollar sectores estratégicos para la sustitución de importaciones; desarrollar una política ambiental de adaptación y mitigación al cambio climático; impulsar la transformación de la industria petroquímica; acompañar el desarrollo de la minería sostenible, como puntal del desarrollo regional y nacional preservando el cuidado del ambiente; desarrollar e implementar tecnologías y políticas de innovación para transformar la producción ganadera; desarrollar nuevas políticas agrícolas para consolidar el liderazgo global; garantizar la simplificación, equidad y eficiencia impositiva; debatir y participar de la necesaria regulación que requiere el ecosistema mediático digital; avanzar en la conformación de fuerzas de seguridad respetuosas de los derechos humanos que garanticen una política de seguridad publica ciudadana y democrática; repensar el Estado que permita reconstruir el pacto democrático y la garantía efectiva de la división de las funciones del poder.’
Todas cuestiones generales que no irrumpieron en la agenda argentina en el último año, ni siquiera en el último período presidencial, y sin embargo son presentadas como el salto de calidad para conseguir el voto de la ciudadanía.
¿Dónde estuvieron los últimos cuatro años? ¿Por qué no lo hicieron? ¿Por qué no lo intentaron?
El Frente para la Victoria, Frente de Todos, Unión por la Patria gozó de mayoría en el Congreso para poder avanzar en muchas de estas propuestas y sin embargo no lo hicieron.
La propia líder del espacio, Cristina Fernández, es la actual Vicepresidente de la República y sin embargo no lideró ninguna de estas propuestas. De hecho habla de su gobierno como hablaba de sí Diego Maradona, en tercera persona. Como si ella no fuera cómplice de las medidas que se tomaron y de las que no se tomaron.
¿Acaso ella se opuso a las políticas llevadas adelante durante la pandemia, que entre otras cosas permitieron groseros abusos y avasallamiento a las libertades individuales?
¿Acaso ella dio un paso al costado cuando su gobierno acudía al Fondo Monetario Internacional?
¿Acaso ella impulsó algo de todo lo que dicen ahora que se debe impulsar?
Todos tenemos historia, algunos curriculum, otros prontuario.
Y todos nos tenemos que hacer cargo de él.
‘Reproduzca esta información, hágala circular por los medios a su alcance: a mano, a máquina, a mimeógrafo, oralmente. Mande copias a sus amigos: nueve de cada diez las estarán esperando. Millones quieren ser informados. El terror se basa en la incomunicación. Rompa el aislamiento. Vuelva a sentir la satisfacción moral de un acto de libertad. Derrote el terror.’
RODOLFO WALSH – AGENCIA CLANDESTINA DE NOTICIAS
No hay comentarios
Pingback: Un paso en falso – Príncipe del manicomio